LAS COPITAS DE AZNAR

Estimados compañeros:

Menuda semanita repleta de noticias de actualidad, importantísimas y de gran repercusión mundial. Primero la Pantoja, ¿se merece o no se merece el trato que le han dado?, después la espera de la salida de la clínica de Sofia y Leticia y por fin, Aznar, nuestro queridísimo ex presi, se da la libertad de hacer un mini monólogo, propio del club de la comedia sobre lo que puede o no puede beber.
Me voy a dar el lujo de hacer una reflexión sobre este bonito alegato de libertad que ni William Wallas en Brave heart. Me alegro de que vaya tan bien el país y que no haya ningún tipo de noticia relevante o coherente para que salga a la luz, como para que puedan publicarse este tipo de comentarios. Es más, me alegro de que nuestro ex presidente, sea ya ex presidente, porque al margen de la cuestión política, es obvio que hay que tener algún tipo de problema para atreverse a hacer ese tipo de comentarios.
Sólo espero que en lo venidero la gente con un cargo o ex cargo público se abstenga de expresar sus opiniones, graciosas, por llamarlas de alguna manera, delante de los medios.